Paul Schneider, vicario parroquial en Villanueva de la Cañada hasta 2017 y que se encuentra de misión en Etiopía desde septiembre del año pasado, está realizando estos días una visita a la diócesis de Getafe, donde se ha reunido con el obispo monseñor Ginés García Beltrán para contarle su experiencia de evangelización en el país africano.
El padre Paul ha regresado de forma temporal a España acompañado del vicario episcopal de Harar (Etiopía), el obispo italiano Angelo Pagano.
El sacerdote diocesano lleva casi nueve meses viviendo en Etiopía, preparándose para tomar posesión de una misión fundada por capuchinos hace 128 años en la región de Harari, una zona montañosa y rural del país africano a unos 500 kilómetros de la capital, donde vive una pequeña y dispersa comunidad cristiana a la que prestará atención espiritual.
Desde su llegada a Etiopía y hasta ahora, el padre Paul ha estado viviendo en Adís Abeba, la principal ciudad del país, para aprender el idioma amárico, haciendo visitas esporádicas a la misión, de la que tomará posesión oficialmente el próximo mes de julio.
Durante este tiempo, el sacerdote ha servido en un colegio y ha colaborado con la clínica que las Misioneras de la Caridad de la madre santa Teresa de Calcuta dirigen en Adís Abeba.
El padre Paul ya ha tenido la oportunidad de hacer algunas visitas breves a la comunidad que le acogerá a partir del mes que viene, de la que destaca su «enorme sentido de la dignidad». «Aunque la mayoría no habla amárico, que es la lengua que he estudiado, sino oromo, me entiendo con ellos con el lenguaje universal del amor», afirma Schneider.