En su mensaje para la Jornada Mundial de los Pobres de 2018, el papa Francisco dice que «la respuesta de Dios al pobre es siempre una intervención de salvación para curar las heridas del alma y del cuerpo, para restituir la justicia y para ayudar a retomar la vida con dignidad. Los pobres no necesitan un acto de delegación sino del compromiso personal de aquellos que escuchan su clamor. La solicitud de los creyentes no puede limitarse a una forma de asistencia, sino que exige esa atención amante que honra al otro como persona y busca su bien».
Con estas palabras, que formaban parte de la oración, comenzó el primer encuentro de voluntariado de Cáritas Vicaría VIII de este curso pastoral. Estuvo presidido por el vicario episcopal de la VIII, padre Ángel Camino Lamelas, quien agradeció la presencia a todos los asistentes, entre los que se encontraban el secretario general de Cáritas Madrid, Javier Hernando Calvo, el sacerdote coordinador de Cáritas en la Vicaría, Pablo Nicolás, los miembros del equipo de dirección y del equipo técnico, además de unos 120 voluntarios. «Gracias por todo lo que hacéis. Muchas gracias. Sois el rostro de la Iglesia», dijo.
A continuación, invitó a todos los que forman la gran familia de Cáritas Vicaría a seguir el buen quehacer cotidiano. Y a vivir el Año Mariano, a participar en la visita pastoral que se está realizando en la Vicaría, y a vivir el arciprestazgo, porque «no hay misión sin comunicación entre parroquia y arciprestazgo».
El tema de reflexión del encuentro giró en torno a la lectura creyente de la realidad. Fue José Manuel Aparicio, párroco de Sta. Mª Madre de Dios y profesor de la Universidad Pontificia de Comillas, el encargado de profundizar en los fundamentos teológicos que sustentan esta lectura creyente. Aportó cuáles son los rasgos que permiten hablar de una lectura de la realidad «creyente», acercó a la lectura que aporta el papa Francisco, y dio pistas para el curso que ya ha comenzado: dibujar los miedos propios, reconociéndolos, para afrontarlos; pensar cómo ampliar los espacios de participación en ese estilo de vida transgresor que sigue el mensaje radical del evangelio; ver la manera de cómo hacerse cercanos a las nuevas pobrezas...
En torno a un chocolate y unos bizcochos se comentó que es Jesús el que conduce a un verdadero encuentro con los pobres, porque ‘Tu compromiso mejora el mundo’, y el que da lugar a un compartir que se convierte en un estilo de vida. ¡Así es Cáritas!.