El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha asegurado que “fe y razón son los dos raíles por los que puede y debe caminar” la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” y, de hecho, ha pedido una “mayor vinculación” de la facultad de Teología y la UCV.

El purpurado presidió ayer la celebración de la festividad de Santo Tomás de Aquino, patrono de las escuelas católicas, de los universitarios y de la educación, en la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” (UCV), de la que es su gran canciller.

En su intervención durante el acto académico, el cardenal Cañizares, que previamente había presidido también la misa de apertura, destacó que el proyecto universitario de la UCV es el de “una universidad que sea siempre de excelencia y que tenga una dimensión social y eduque verdaderamente para transformar esta sociedad y donde también, como en el Evangelio y para Dios, los pobres sean lo primero”.

Además, el purpurado hizo alusión a la encíclica “Fides et Ratio” de san Juan Pablo II para que “sea uno de los horizontes y las luces que asimilemos porque son los dos caminos, los dos raíles, por los que puede y debe caminar nuestra Universidad”.

Asimismo, el Cardenal indicó que la UCV debe tener “una base filosófica mucho mayor” sin olvidar “la teología, como base”. Por este motivo, pidió a la UCV y a la Facultad de Teología tener “una vinculación y una relación muchísimo mayores que la que tienen actualmente” e incidió en la “creación, en la UCV, de una cátedra sobre santo Tomás, juntamente con la Facultad de Teología”.

En el acto académico, desarrollado en el campus de Valencia-Santa Úrsula, monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la Pontificia Academia de Ciencias y de Ciencias Sociales del Vaticano, pronunció la lección magistral. También participaron el vicecanciller, José T. Raga; el rector, José Alfredo Peris; así como miembros del Patronato, Consejo de Gobierno, profesores, estudiantes y personal de administración y servicios.

Lección magistral de monseñor Sorondo
El acto académico comenzó con la lección magistral, titulada “La antropología tomista: una respuesta atendible al estatus del ser humano presentado por la ciencia y filosofía moderna”, a cargo de monseñor Sánchez Sorondo, quien afirmó que la encíclica `Fides et ratio´ “viene a auxiliarnos en la tarea de la nueva evangelización” pues “si plantamos la semilla del Evangelio en el contexto del mundo globalizado, la fe puede resultar liberadora y responder a los interrogantes del hombre actual”.

En su conferencia, el canciller de la Pontificia Academia de Ciencias y de Ciencias Sociales del Vaticano enunció las claves de la antropología metafísica tomista y defendió que “es decididamente una anticipación de la filosofía moderna en cuanto el punto de partida es el ser humano, o sea la antropología, como en Kant pero por la vía opuesta de la metafísica”.

Del mismo modo, esta antropología, que subraya la dignidad del hombre y su capacidad de transcendencia, “es una antropología para la nueva evangelización” que “es el motor que impulsó a Santo Tomás a dedicarse a la filosofía en su época, que guardaba tantas similitudes con la nuestra”, expresó el prelado.

Por su lado, el rector de la UCV aseguró que solo se construye Universidad Católica si su ejercicio profesional y sus planes de estudios “se abren a la plenitud humana que es Cristo”, si se deja que la fe “purifique y fortalezca la razón para afinar mejor y más consistentemente en la búsqueda de bien humano”.

Asimismo, Peris aseveró que "lo que nos urge a construir diariamente nuestra comunidad universitaria es la llamada de la fe. Dios cuenta con nosotros de múltiples maneras para que escuchemos su voz y hagamos presente su reino en el mundo universitario, percibiendo a Jesucristo como luz que ilumina la historia y ayuda a encontrar la vía del futuro”.

Tras la lección magistral tuvo lugar la investidura de los nuevos doctores que han defendido sus tesis en la Universidad Católica de Valencia en el último año, la entrega de medallas a los doctores que se han incorporado al claustro y de insignias al personal que lleva 15 años de trabajo en la universidad, y el homenaje a los miembros de la comunidad universitaria recién jubilados.