Archidiocesis de Madrid - Cáritas Burgos lamenta la muerte en la calle de una persona sin hogar

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Lunes, 02 marzo 2015 05:35

Cáritas Burgos lamenta la muerte en la calle de una persona sin hogar

Cáritas Diocesana de Burgos ha denunciado la muerte, la pasada semana, de Nicusor Florea, participante de los servicios de personas sin hogar y vivienda de Cáritas y que fallecía a los 47 años en la calle. De origen rumano, estaba sufriendo una enfermedad que, unida a su condición de exclusión social por falta de empleo y recursos, le abocaba a una situación de riesgo sociosanitario grave.

El fallecido había estado acompañado, además de por Cáritas, por diversos servicios y organizaciones de la ciudad de Burgos. Últimamente estaba durmiendo en la calle, lo que probablemente haya sido un factor desencadenante para este desenlace fatal.

Cáritas Burgos recuerda que las personas sin hogar tienen una pérdida media de 25 años de esperanza de vida. Además de reclamar “un mayor esfuerzo colectivo para evitar estas muertes casi anónimas que simbolizan un cierto fracaso de nuestro modelo social”, apuesta por “que se sigan implementando los recursos para que nadie más acabe en esta situación”.

“Zona liberada” sobre desahucios hipotecarios

Estrechamente relacionada también con la precariedad del acceso al derecho a la vivienda –una de las líneas de incidencia prioritarias de Cáritas Burgos--, el pasado 26 de febrero tuvo lugar una actividad de reflexión social y oración llamada “Zona liberada”. Preparada por el Arciprestazgo del Vena, esta convocatoria se centró en el testimonio indirecto de una familia desahuciada que ha venido sufriendo desde el inicio de la crisis situaciones de pérdida laboral, de salud y de prolongada precariedad, lo que les ha llevado a tener que solicitar apoyo a diversas entidades y a negociar la hipoteca con la entidad bancaria con la que se consiguió una carencia de 5 años.

En este proceso, que ha durado varios años, las situaciones fueron creando en los miembros de la familia desde impotencia y sensaciones de fracaso a conflictos, pérdida de confianza y de estabilidad personal. En la reflexión compartida por los asistentes, se puso de manifiesto cómo el sistema social expulsa fácilmente a las personas sin ofrecerles segundas oportunidades y cómo dificulta enormemente retornar a la línea de integración. Se señaló, también, en qué medida la crisis y el socavamiento de los derechos básicos han destrozado en muchas ocasiones la resistencia de las personas y de la sociedad para sostener su integridad como comunidad humana y solidaria.

Con el nombre de “Zona liberada”, Cáritas Burgos quiere proponer un espacio para ahondar en la exclusión desde una mirada humana, liberada de prejuicios o valoraciones técnicas. Estas citas, abiertas al público, se realizan cada dos meses en la Unidad de Emergencia del Programa de Personas sin hogar, un lugar con especial valor para profundizar en las condiciones de la exclusión y sus secuelas humanas.