El delegado episcopal de Cáritas Española, Vicente Altaba Gargallo, invitó a los voluntarios de las Cáritas gallegas a situar y vivir el compromiso y el servicio caritativo y social “como un verdadero servicio evangelizador”. Esta fue la apuesta que lanzó durante su intervención e el Encuentro anual de Formación de las Cáritas de Galicia celebrado el pasado 28 de febrero en Santiago de Compostela.

La sesión de trabajo, convocada bajo el lema “Cómo ser evangelizadores en Cáritas a la luz de Evangelli Gaudium”, estuvo presidida por el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio Barrio, y tuvo como marco el colegio compostelano de La Salle, donde se dieron cita cerca de trescientos agentes de la institución procedentes de las Cáritas Diocesanas de Mondoñedo-Ferrol, Lugo, Ourense, Tui-Vigo y Santiago de Compostela.

Compromiso social

En su intervención, que estuvo estructurada en dos ponencias, Vicente Altaba abordó la misión evangelizadora en el ejercicio de la caridad, un aspecto sobre el que recordó que es desde ese lugar donde el Papa Francisco habla de la acción social en la misión evangelizadora de la Iglesia.

Constato, en ese sentido, que “estamos comprometidos en lo social como Iglesia evangelizadora” y que esta tiene que ser en salida misionera, en continua renovación y conversión, encarnada en los límites y de puertas abiertas, alegre y que desarrolle el sujeto eclesial, y que no cede a las tentaciones que amenazan a los agentes pastorales.

Altaba señaló la prioridad del compromiso en lo social “porque lo exige nuestra propia fe cristiana”, insistiendo en la fe trinitaria como fundamento del compromiso.

Finalizó su primera exposición con una referencia a la enseñanza de la Iglesia sobre cuestiones sociales y el destino universal de los bienes. Para el ponente el compromiso en lo social se refleja en una serie de objetivos: pasar de la exclusión a la inclusión social de los pobres, que los pobres tengan experiencia de la Buena Noticia del amor de Dios, y que la Iglesia sea signo vivo y creíble de la acción salvadora de Dios en la historia.

Una acción caritativa y social evangelizadora

En su segunda ponencia, el delegado de Cáritas Española indicó que los pobres son los primeros destinatarios del Evangelio y que la opción por los pobres es teológica. Subrayó que la acción social “está al servicio de la liberación y promoción de los pobres, y debe partir de escuchar el clamor de los pobres y de los pueblos”. Por tal motivo, dar de comer a los pobres implica diversos niveles de compromiso, ya que “la solidaridad debe vivirse como la decisión de devolver al pobre lo que le corresponde y defender sus derechos”.

La opción por los últimos es un signo de autenticidad. “Hemos de dejarnos evangelizar por los pobres”, aseguró. Para ello, apeló a la urgente necesidad de atacar las causas estructurales de la pobreza, algo que se puede hacer desde la denuncia profética.

Cinco pasos

Se refirió, asimismo, al lugar privilegiado que debe ocupar la caridad a través de cinco pasos del proceso evangelizador: la mirada contemplativa de la fe, el testimonio de un estilo de vida atractivo, el diálogo sobre el sentido de nuestras vidas, el primer anuncio claro y respetuoso, y la invitación a participar.

En la última parte de su ponencia mencionó, además, los cuatro criterios de discernimiento de Papa Francisco que ya aparecen, dijo, en el Modelo de Acción Social de Cáritas:

- El tiempo es superior al espacio: dar prioridad a los procesos.

- La unidad prevalece sobre el conflicto: la acción social como diálogo entre sujetos.

- La realidad es más importante que la idea: vivir inmersos en la realidad sin olvidar que la persona es lo primero.

- El diálogo, camino para el bien común y la paz social: recuperar el sentido de la religación intersubjetiva y trascendente. Somos interdependientes.

Ser buena noticia para los pobres

A modo de conclusión pidió a los presentes que redescubran y acrecienten el gozo de hacer presente el Evangelio en la acción caritativa y social, y que la acción evangelizadora “sea buena noticia para los pobres y transformadora de esta sociedad que generara desechos humanos y los excluye del desarrollo económico y del progreso social”.

El prelado compostelano, monseñor Barrio, presidió la eucaristía, que fue concelebrada por varios delegados episcopales de las Cáritas gallegas asistentes a la jornada. El encuentro finalizó con el trabajo en grupos, 24 en total, en los que los participantes abordaron cuestiones relacionadas con la acción caritativa y social insertada y comprometida en el proyecto de una Iglesia misionera. Con la puesta en común del trabajo de reflexión por parte de los portavoces de los grupos de trabajo, concluyó la jornada de formación.