Una parroquia de Croacia ha solicitado a los religiosos amigonianos de Valencia reliquias de sus mártires de la persecución religiosa de 1936 beatificados para ser veneradas en el templo.
El sacerdote Bozo Barisic de la parroquia San Anselmo en Nin (Croacia) solicitó el pasado mes de enero las reliquias “para mi comunidad parroquial, para la devoción y veneración pública de los fieles”.
En la actualidad, parroquias de 21 países de todo el mundo veneran reliquias de los 23 mártires amigonianos que fueron beatificados en el año 2001 por el papa San Juan Pablo II en Roma.
Las parroquias que ya cuentan con reliquias de estos mártires, tras haberlas solicitado, se encuentran, además de España, en Italia, México, Filipinas, Brasil, Colombia, Estados Unidos, Israel, Holanda, Polonia, El Salvador, Argentina, Australia, Arabia Saudí, Emiratos Arabes, Singapur, Portugal, Vietnam, Costa Rica, Ecuador y, desde ahora, Croacia, según ha indicado el religioso Terciario Capuchino Agripino González.
En España todos los conventos de las congregaciones religiosas de los Terciarios y las Terciarias Capuchinas también conservan reliquias de los mártires amigonianos y en la parroquia de Monte Sión de la localidad valenciana de Torrent están enterrados los restos de algunos de ellos , ha añadido.
El 11 de marzo del año 2001, el papa San Juan Pablo II beatificó a 233 mártires de la persecución religiosa en España. Entre ellos, había 19 Terciarios Capuchinos y 3 Terciarias Capuchinas, congregaciones fundadas por el valenciano fray Luis Amigó i Ferrer. También beatificó a la seglar Carmen García Morón, colaboradora de la Familia Amigoniana. De todos estos mártires, 12 religiosos, las tres religiosas y la seglar fueron asesinados en la diócesis de Valencia.
Fray Luis Amigó y Ferrer
Fray Luis Amigó y Ferrer nació en Massamagrell (Valencia) en 1854, ingresó en la orden religiosa de los Capuchinos a los 19 años y, a los 24, fue ordenado sacerdote. En 1907 fue nombrado obispo de la diócesis de Solsona hasta 1913, año en el que fue designado titular de Segorbe. Dedicó su vida también a promover el cuidado de los encarcelados y la educación cristiana de la juventud. Falleció el 1 de octubre de 1934 en la localidad valenciana de Godella.
Amigó fundó en Massamagrell a la edad de 30 años, la congregación religiosa de las Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia, a las que encomendó como principales misiones la atención de enfermos, el cuidado de los huérfanos y la educación integral de niños y jóvenes, especialmente aquellos en riesgo de exclusión social, con el objetivo de procurar su reeducación e inserción en la sociedad.
En 1889 Amigó fundó también la congregación religiosa de los Terciarios Capuchinos. En la diócesis de Valencia la congregación cuenta, en Godella, con un colegio-internado para niños y jóvenes con problemas de adaptación social, así como con otros colegios en Torrent y Godella, también donde imparten educación Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato o Formación Profesional.
Igualmente, la congregación dirige una granja-escuela en Villar del Arzobispo, un seminario y centro vocacional en Godella, así como la parroquia Nuestra Señora de Monte Sión en Torrent. La Familia Amigoniana incluye, además, varios grupos de jóvenes y seglares.
España
Miércoles, 20 mayo 2015 06:24
Una parroquia de Croacia solicita a los religiosos amigonianos de Valencia reliquias de sus beatos mártires
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